Resulta que una de mis amigas estaba con un dolor de cuello tremendo la semana pasada.
Via messenger supongo que todos aportamos algún saber casero.
Yo le recomendé que se acercara el secador de pelo en la zona afectada porque, a falta de almohadilla eléctrica, es la mejor fuente de calor seco.
Supongo que lo habrá intentado sin embargo hubo un consejo más ocurrente que por ahí, si de probarlo, algún resultado le iba a dar:
"Frotate una barrita de AZAFRÁN".
Impagable.
Me imagino a la dolorida cual geisha con el cuello todo decorado, en lugar de blanco todo colorado!!
viernes, diciembre 18, 2009
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1 comentario:
Mientras no le ponga azufre al arroz y haga la gran yiya murano.. lo bueno de ponerse azafran en el cuello es que te queda medio perfumado
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